Introducción:
Los Ángeles Sangrientos son una de las 20 Primeras Legiones Fundadoras de los Marines Espaciales. Son bien conocidos por su naturaleza de sed de sangre en el campo de batalla y temidos por la maldición de la semilla genética que llevan. Los Ángeles Sangrientos es uno de los Capítulos del Adeptus Astartes más antiguos en cuyas filas todavía se hayan Marines Espaciales con más de mil años estándar al servicio del Emperador de la Humanidad. Debido a recientes sucesos (tales como la Insurrección de Arkio), su número se ha visto diminuído drásticamente. Bajo la amezana de la extincción y con el fin de reponer las bajas sufridas lo más rápidamente posible, los Ángeles Sangrientes se vieron forzados a solicitarles a sus Capítulos Sucesores de los posteriores Fundadores de Astartes, de un diezmo en forma de guerreros de sus reservas de Neófitos, es decir, de sus candidatos a Marine Espacial. Gracias a este tipo de diezmos de nuevos reclutas, los Ángeles Sangrientos pudieron recuperar las bajas sufridas de una forma rápida.
Historia del Capítulo:
Sanguinius
Cuando los 20 superhumanos desarrollos mediante ingeniería genética, conocidos como los Primarcas, fueron esparcidos por toda la galaxia por las maquinaciones de los Dioses del Caos que los robaron del laboratorio genético secreto del Emperador ubicado bajo las Montañas del Himalaya en Terra, algunos de ellos sufrieron de algún tipo de mutación debido a la breve exposición a los poderes del Caos. El Primarca que se vió afectado en mayor medida fue el infante cuya cápsula de gestación cayó en la segunda luna del mundo de Baal, Baal Secundus, el niño-Primarca ya poseía un par de alas cuando fue encontrado por la tribu Baalite, también conocida como La Sangre. Aunque inicialmente ellos querían matar al niño debido a su extraña mutación, la tribu rápidamente lo reconoció como un ser angelical en alma y cuerpo. Lo llamaron Sanguinius, el Ángel de La Sangre en su corrupto dialecto del Alto Gótico.
***Hasta aquí por hoy. Seguiré redactando poco a poco.***